miércoles, 15 de febrero de 2012

FERVOR ESPIRITUAL DE STA. CLARA


En la 3ª Carta.

“A la hermana Inés, Clara, sierva de las Hermanas Pobres, le AUGURA los gozos de la salvación eterna en el Autor de la misma y cuanto de bueno pueda DESEARSE.”

TE DESEO en todo momento salud en el Señor, como me la DESEO a mí misma.”

En la 4ª Carta.

“A quien es la mitad de mi alma, a la Señora Inés, Clara le DESEA salud y que cante el cántico nuevo ante el trono de Dios y siga al Cordero a donde quiera que vaya”.

“Aunque no te he escrito con la frecuencia como lo DESEAN Y ANHELAN tu alma y la mía, no creas que el FUEGO DEL AMOR que te tengo arde menos, afectuosamente en las entrañas de tu madre. Me lo ha impedido la falta de mensajeros y el peligro de los caminos.”

“Mira este Espejo (Cristo nacido en un pesebre y muerto afrentosamente) así te inflamarás más y más en el fuego de la caridad. Y SUSPIRANDO DE AMOR y forzada por la violencia del ANHELO de tu corazón exclama en alta voz: “Atráeme”, correremos”.

“Mira en mis letras el afecto de madre que te profeso a ti y a tus hijas, ARDIENDO en vuestro amor cada día.”


2 comentarios:

  1. ¡qué bonito! y que profundidad si llegásemos a identificarnos con Jesús siquiera un poquito, si como Clara al mirarme en el espejo, viese a Jesús, si viese a Jesús en el hermano, en el projímo.
    ¡Ojala y esta Cuaresma encontremos algo de ese Amor de Clara!

    ResponderEliminar
  2. Seguir al Cordero a donde quiera que vaya!!! precioso!!! como nos dice hoy la liturgia: empujados por el Espíritu al desierto... donde sea, donde sea...

    Muchas gracias, Hermanas, por compartir con nosotros!!!!

    ResponderEliminar