sábado, 22 de abril de 2023

HOY NOS HA VISTADO LA IMAGEN PEREGRINA

 DE LA VIRGEN DE LOURDES

La Hospitalidad de Lourdes de Albacete cumple los 50 años de su fundación.

Este año 2023 del 17 al 21 de junio será la peregrinación número 50 de la Hospitalidad Diocesana de Albacete a Lourdes.

Con motivo de este aniversario, el 11 de febrero de 2023, trajeron desde Lourdes esta imagen peregrina. 

Está recorriendo casi todos los pueblos de nuestra diócesis de Albacete.

La Hospitalidad tiene su sede en la Parroquia de Franciscanos de Albacete. 

Al fondo en el centro el abrazo de San Francisco con el Crucificado. Parroquia de Franciscanos, Albacete.

A las 12 de la mañana ha llegado a nuestra iglesia la imagen, siendo recibida con cantos y mucha emoción.


Imagen peregrina de la Virgen de Lourdes 

En el templo de San Juan de la Penitencia de Villarrobledo. 

Hermanas Clarisas.

La madre abadesa ha dirigido una oración a la Virgen pidiendo por los enfermos.

Algunos miembros de la Hospitalidad de Lourdes de Albacete y de Villarrobledo

Luego ha tenido lugar el gesto del agua, tal como dijo la Virgen a santa Bernardette:

"Bebe y lávate"

Hemos tenido tiempo de besar y venerar la Sagrada Imagen.

Esta visita ha dejado nuestro patio con olor a tierra mojada. 

El cielo se abrió y ha llovido durante un poco tiempo.

¡Falta nos hace la lluvia!

Cuando la imagen salía, ha tenido que ser cubierta con un plástico.

Esta imagen estará en Villarrobledo el sábado 22 de abril y el domingo.

El sábado por la mañana ha visitado el Asilo de Nuestra Señora de la Caridad y los dos conventos: Bernardas y Clarisas.

Esta tarde a las 20:00h en la Parroquia de Santa María tendrá lugar la Eucaristía y el gesto del agua.

Mañana domingo, a las 12:00 será la Eucaristía en la Parroquia de Santa María con la Unción de los enfermos.

Por la tarde, después de la misa, saldrá la procesión con antorchas desde Santa María al Santuario de la Patrona: Nuestra Señora de la Caridad.

Esta imagen de la Virgen de Lourdes estará peregrinando durante tres meses, hasta el día 13 de mayo.

Ese día habrá en la S. I. Catedral de Albacete una solemne Eucaristía y por la tarde tendrá lugar una gala benéfica en el Teatro Circo como culminación de la Virgen Peregrina.

sábado, 15 de abril de 2023

UN DÍA MUY ESPERADO

 SOR Mª BENITA HACE SU PROFESIÓN DE VOTOS TEMPORALES

El sábado 15 de abril, víspera de la Fiesta de la Divina Misericordia, nuestra hermana Benita ha prometido sus Votos:

Vivir por tres años en pobreza, castidad, obediencia y clausura, según la Regla de Santa Clara y las Constituciones de nuestra Orden.

Desde primera hora de la mañana cantos, flores, regalos, adornos y tarta para festejar y felicitar a nuestra hermana en un día tan grande.

Han venido las hermanas de Lorca y de Cieza para acompañarnos.

A las 17:30 h. ha comenzado la Eucaristía, presidida por el Vicario General de la Diócesis de Albacete: D. Julián Ros Córcoles, concelebrando el párroco de Santa María: D. Pedro José González Rodenas y acolitando D. Érik Arnoldo López, seminarista de nuestra diócesis.

Terminado el canto de entrada, se ha leído esta monición:

"Nos encontramos todavía dentro de la Octava de Pascua. Cristo Resucitado está vivo en medio de esta asamblea, reunida para celebrar la Eucaristía.

Esta comunidad de hermanas clarisas de Villarrobledo hace suyas las palabras del salmo: 

“El Señor ha estado grande con nosotras y estamos alegres”

Hoy, víspera de la Fiesta de la Divina Misericordia, Sor María Benita, hará su Profesión de Votos Temporales en la Orden de Santa Clara de Asís, fiel discípula de San Francisco. Una Orden que se caracteriza por la vida en pobreza, sencillez, fraternidad y oración.

Damos gracias a Dios porque sor Benita ha respondido con generosidad a la llamada de Dios, dejando su país, su familia y amistades para venir a Villarrobledo y formar parte de esta comunidad de hermanas.

Pidamos a Dios que el ejemplo de su entrega anime a otras jóvenes a descubrir la belleza de una vida entregada solo a Dios".

Después del Evangelio, proclamado por don Pedro, y antes de la homilía, don Julián ha preguntado a la novicia:

Querida hermana Benita,

¿QUÉ PIDES A DIOS Y A LA IGLESIA?


Pido, por amor de Dios,

de la bienaventurada Virgen María,

de nuestro Padre san Francisco,

de nuestra Madre santa Clara

y de todos los santos,

se me conceda la gracia

de hacer la Profesión de votos temporales

en nuestra Orden de Hermanas Pobres de santa Clara,

para servir a Dios fielmente,

a la Iglesia y a todos los hombres

con mi vida de contemplación y penitencia.

y formar con esta Comunidad

un solo corazón y una sola alma.

Con la petición de sor Benita, don Julián ha comenzado su homilía con esta pregunta: ¿Sabes lo que pides?

Es una petición muy provocadora para los valores que hay en el mundo.


Imagen de Jesús de la Divina Misericordia, junto con la de santa Faustina y su reliquia

VIVIR EN POBREZA es la mayor riqueza, haciendo de Dios el único y supremo bien de nuestro existir.

VIVIR EN OBEDIENCIA nos lleva a cumplir la voluntad de Dios, en la tierra como en el cielo. Que la tierra se parezca al cielo.

VIVIR EN CASTIDAD supone un amor esponsal hacia Cristo.

LA VIDA EN COMUNIDAD es una provocación para nuestros días, tal como se ha leído en la Primera Lectura de la misa:

Los creyentes vivían todos unidos y lo tenían todo en común, vendían sus posesiones y las repartían, según la necesidad de cada uno.

La vida consagrada un testimonio que ayuda a todos los cristianos a ser conscientes de las ataduras que nos quitan la libertad.

Jesús Resucitado se presentó en medio de la comunidad a los ocho días y pidió a Tomás que metiera sus dedos en las llagas para creer.

Todos llevamos algo de Tomás y necesitamos signos que aviven nuestra débil fe.

Hoy somos testigos de cómo una joven veinteañera decide entregar su vida al Señor con la profesión de los votos religiosos.

Este testimonio de fe ayuda a toda la comunidad cristiana.

Finalizada la homilía, sor Benita ha pronunciado sus votos y la madre le ha hecho entrega de las insignias de la profesión religiosa:

El velo negro signo de su pertenencia a Cristo Esposo.

La Regla de Santa Clara, libro de la vida, médula del Evangelio y camino de perfección.

El Crucifijo, que debe mirar la clarisa con deseo de parecerse a su Esposo en sus padecimientos.

La medalla de la Inmaculada, Madre de Dios y Madre nuestra.

La corona de flores es el anticipo de la Corona de la Vida que Cristo tiene prometida a los que le aman.

Mientras el Coro de la Parroquia de San Blas cantaba, hemos dado a sor Benita un abrazo fraterno de felicitación.

Luego ha continuado la Eucaristía, con las preces y la procesión de ofrendas.






Después de la comunión, sor Benita ha rezado una oración personal de acción de gracias a Dios y seguidamente ha dado las gracias a todos los asistentes.

Para terminar, hemos pasado todos al locutorio a tomar un chocolate.


Damos gracias a Dios y a Nuestra Señora de la Teja, que se va eligiendo como "guardianas" a jóvenes de nuestro tiempo, para que este monasterio donde Ella está, perdure en el tiempo.

jueves, 6 de abril de 2023

MONUMENTO JUEVES SANTO 2023

“YO SOY EL PAN VIVO QUE BAJA DEL CIELO”

Inspiradas en estas palabras de Jesús hemos preparado el monumento de este año.

En la parte superior vemos la representación de una forma gigante con la inscripción:

JHS

Que significa:

Jesús Hombre Salvador

Está en alto, en la parte superior, porque Cristo baja cada día Cristo al altar por manos del sacerdote.

En el centro está el sagrario, entronizado en un haz de luz. Ahí está encerrado Jesús Eucaristía.

“Vista, gusto y tacto se engañan en ti.

La fe está segura tan solo al oír,

creo cuanto ha dicho el Hijo de Dios,

la Verdad del Verbo, no hay Verdad mayor”

A la derecha del sagrario un cuadro de Jesús ofreciéndonos su Cuerpo para comer, su sangre para beber.

“Tomad y comed, todos de Él, porque este es mi Cuerpo, entregado por vosotros”

“Tomad y bebed, todos de Él, porque esta es mi Sangre, derramada por vosotros”

Un Dios que se da, que se entrega por amor; primero en la Eucaristía como anticipo, de forma incruenta, luego en la Cruz, de forma cruenta.

Junto al cuadro de Jesús, unas flores y unas palmas verdes que nos recuerdan su martirio.

¡ES EL REY DE LOS MÁRTIRES!

La mesa, cubierta con un precioso mantel, y los platos de barro, nos recuerdan la Última Cena de Jesús con sus apóstoles.

Durante la Cena, instituyó el sacramento del Sacerdocio y de la Eucaristía.

El vino y el pan, dos alimentos básicos del hombre, son transformados por Jesús en su Cuerpo y Sangre.

A los pies de la mesa una palangana nos recuerda que Jesucristo es el “Siervo de Yahvé” descrito por el profeta Isaías.

Solo los siervos lavaban los pies y eso hizo Jesús con sus apóstoles: Se puso a sus pies.

¡Qué bien expresa el anonadamiento de Jesús el apóstol san Pablo en su carta a los filipenses!

“Cristo, a pesar de su condición divina, 

no hizo alarde de su categoría de Dios, 

al contrario, se despojó de su rango 

y tomó la condición de esclavo.

Se rebajó hasta someterse incluso a la muerte 

y una muerte de Cruz”

(Filipenses 2, 6)

El raso dorado iluminado nos recuerda la zarza ardiente del Monte Sinaí, lugar de la presencia de Dios. Desde la zarza Dios dijo a Moisés:

“Descálzate, porque el sitio que pisas es sagrado”

(Éxodo 3, 5)

Ante la Presencia Real de Cristo en la Eucaristía nos tenemos que “descalzar”, tomando conciencia de que estamos en la presencia de Dios.

Nos remite también a las palabras de Jesús:

“He venido a prender fuego a la Tierra

y ¡ojalá estuviera ya ardiendo!”

(Lucas 12, 49)

La palma es signo de victoria.

Cinco palmas a la derecha del sagrario nos recuerdan las cinco llagas dolorosas del salvador, que los clavos hicieron en sus manos, pies y costado.

Las flores, como criaturas de Dios, se yerguen esbeltas hacia su Dios y creador, proclamando su grandeza; y se postran en adoración reconociendo su señorío. 

Los tallos están colocados en forma vertical y horizontal.

Acompañemos estos días santos a Nuestro Señor, realmente presente en el monumento que hemos preparado para Él.

Hagamos con Él la Pascua, el “paso” de la muerte a la Vida.

Agradezcamos  los dolores que ha soportado por nuestra salvación.

Sintámonos amados personalmente por un Dios hecho hombre en la persona de Jesús.

Vivamos como verdaderos hijos de Dios.