EL MESÍAS, EL SEÑOR,
Lucas 2, 11
El nacimiento de Jesús en Belén no pertenece al pasado, es un
hecho actual que la liturgia nos hace presente.
No somos menos afortunados que los pastores que fueron a adorar
al Salvador en la noche de Navidad. Los que asistimos anoche a la Eucaristía
tuvimos la dicha de ser testigos del nacimiento de Jesús y experimentar el gozo
que se vivió en aquella primera Nochebuena.
Anoche tuvimos una preciosa misa del gallo que nos hizo
revivir el misterio del nacimiento de nuestro redentor.
Compartimos con los lectores de nuestro blog las fotografías
de un Niño Jesús, que estos días ocupa un lugar preferente en la vida de nuestra
comunidad. Explicamos brevemente su historia y la importancia que tiene esta
imagen.
Es un Niño del siglo XVI que pertenecía a don Juan Cano
Moragón, fundador de nuestro monasterio y que llegó con las primeras fundadoras
el 12 de mayo de 1614.
El padre Pablo Manuel Ortega visitó nuestro monasterio para
escribir la Crónica de la Provincia Franciscana entre 1730 y 1740 para escribir
su crónica. Al llegar encontró un rico archivo con las vidas de las monjas
venerables que vivieron en él. La más documentada era sor María de san Antonio
a la que dedica un gran número de páginas. Esta hija de Villarrobledo, muerta
en olor de santidad, fue la primera novicia que ingresó tres meses después de
haberse fundado. En el tercer tomo, pg 21 podemos leer esto:
“Expresole su divino Esposo, en repetidas cariñosísimas
demostraciones, manifestándosele en la imagen de un hermoso niño que había en
el monasterio, que comúnmente le llamaban «el Fundador», y también de las
señoras Moragonas, porque le habían llevado las dos hijas de Juan Cano Moragón”
ORTEGA, Pablo Manuel. Crónicas Franciscanas de España.
Provincia de Cartagena. Publicaciones de Archivo Ibero Americano. Madrid: Ed.
Cisneros, 1981. 3 Volúmenes. Reproducción facsimilar de la única edición de los
años 1740, 1746 y 1752. ISBN:
84-7047-023-X; 1746 ISBN: 84-7047-026-4; 1752 ISBN: 84-7047-027-2.
A este Niño se le conoce como el Esposo, por llevar el anillo de la monja que hace los votos solemnes.
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