martes, 21 de octubre de 2025

VIRGEN DE LA TEJA 2025

 MISA VOTIVA

Ayer, 20 de octubre, celebramos el último día de la novena a Nuestra Señora de la Teja en que se meditó la Coronación de María Santísima como reina y señora de todo lo creado.

Durante la novena se cantaron tres cantos propios de la Virgen de la Teja:

·     - El Himno

·     - La Aclamación

· Este año se añadió una antífona musicalizada compuesta por dos miembros de Amivite. La letra va detrás de las copias de las tejas que se han elaborado este año.

La Virgen de la Teja adornada para su fiesta

Antes de la novena el sacerdote, D. Daniel Galindo Valcárcel, párroco de san Blas, hizo la reserva el Santísimo y seguidamente dio inicio la novena.

Una vez finalizada, empezó la misa votiva presidida por D. Daniel y concelebrada por el párroco de San Sebastián, D. Santiago Bermejo. Acolitaron dos monaguillos.

Escribimos una reseña con fotos para todas las personas que se unieron en espíritu desde la distancia, por su gran devoción hacia la Virgen María, en su advocación de La Teja.

MONICIÓN DE ENTRADA

Queridos hermanos y hermanas: Paz y bien

Durante nueve días hemos estado meditando la vida de la Virgen, hemos gozado con las misas votivas, celebradas por diferentes sacerdotes, que nos han ayudado a conocerla y amarla más. Unos días de gracia para todos los asistentes.

Hoy hemos meditado en la novena la Coronación de la Santísima Virgen y celebraremos la misa votiva de Santa María la Nueva Mujer.

Ella eligió este monasterio para dejar un signo material de su presencia, y así, hacerse cercana con su maternal solicitud, ofreciéndonos su compañía y derramando lluvia de gracias, desde un humildísimo trono de barro, porque bien conoce todas nuestras necesidades.


El estandarte de la Virgen junto a su altar

Ponemos en su corazón, lo que traemos en los nuestros y solicitamos su intercesión poderosa para ser mejores hijos suyos y buenos cristianos para la gloria de Dios.

Esta año tenemos una novedad, como colofón de la novena: podemos llevarnos a casa la Virgen de la Teja para que derrame sus bendiciones sobre toda la familia. Como hace casi 200 años visitaba las casas de los enfermos, ahora podemos tenerla siempre con nosotros.


Copia de la Virgen de la Teja. Prohibida su reproducción. 

Imagen protegida por D0539260

Al final de la misa el padre Daniel bendecirá las copias de la Virgen de la Teja, que hemos traído, para que pueda presidir nuestros hogares.

Con inmenso gozo y agradecido corazón comenzamos esta Eucaristía.

1ª LECTURA: Ap. 2, 1-5

SALMO Isaías 61, 10 ss . 

EVANGELIO: Lucas 1, 26-38

HOMILÍA

Queridos hermanos en Cristo: Nos reunimos hoy en este monasterio bajo la mirada maternal de la Virgen de la Teja para celebrar con gozo una fiesta tan querida. Nos congrega el amor a María, esa mujer sencilla y fiel que cambió el curso de la historia al decir sí al plan de Dios.

Hemos proclamado el Evangelio de la Anunciación, momento decisivo de la Historia de la Salvación. El ángel Gabriel se presenta en Nazaret anunciando a una joven que será la madre del Salvador y María sin comprender del todo, se fía de Dios y responde “Hágase en mí según tu Palabra”.

1 .  María la Nueva Mujer.

Miremos a María como la nueva mujer en contraposición con Eva que dudó de Dios y cayó en la desobediencia. María se fía y obedece sin temor sin buscar nunca el protagonismo.

María representa a la nueva humanidad redimida ya del pecado.

2.  La Virgen de la Teja.

Hoy recordamos la presencia maternal de María en una simple teja de barro usada por sor Rosalía para tapar el cántaro de agua de su celda.

Este acontecimiento nos habla de lo que Dios puede hacer con lo pequeño y lo sencillo (una teja de barro, una monja escondida en la clausura).

Dios actúa donde hay humildad y docilidad.

Confiemos en Dios en nuestras sequías, cuando la vida no es fácil y nuestras cosechas personales se ven amenazadas: salud, trabajo, relaciones.


PRECES

1- Por la Santa Iglesia: para que acogiendo con humildad y fe el don de la salvación, sea cada vez más, canal de gracia y de perdón para la humanidad. Roguemos al Señor.

 

2- Por todos los pueblos que sufren en la actualidad el azote de la guerra, para que cuanto antes se solucionen los conflictos y llegue la paz. Roguemos al Señor.

 

3- Por los que de manera especial están sufriendo, a causa de la guerra y el terrorismo en Ucrania y Oriente Medio, para que en comunión con la Virgen María reciban consuelo y esperanza de las fuentes del Salvador. Roguemos al Señor.

4- Por todos los que se entregan al servicio de los pobres, de los enfermos y de los necesitados: para que, como María en las Bodas de Caná, sean imagen de la solicitud de Cristo por los hermanos. Roguemos al Señor.

5- Por los jóvenes: para que la Virgen María les acompañe en su existencia educándoles en el amor puro, fuente de paz y de verdadera alegría. Roguemos al Señor.

 

6- Por los sacerdotes, las almas consagradas y esta Comunidad de Hermanas Pobres de Santa Clara, bendecida por la presencia maternal de María, en su advocación de la Teja, para que crezcan en su fidelidad al Evangelio y sean bendecidas con nuevas vocaciones. Roguemos al Señor.

 

7- Por los que hoy nos reunidos en esta celebración y los que no han podido acompañarnos: para que aprendamos de María a fiarnos humildemente de la Palabra de Dios y experimentemos en nuestra vida la fuerza de su amor. Roguemos al Señor.

 

8- Por todas las personas que se encomiendan a la intercesión de la Virgen de la Teja y piden la oración de las hermanas clarisas de esta comunidad.

OFRENDAS

UNA COPIA DE LA VIRGEN DE LA TEJA

Las hermanas clarisas ofrecen esta copia de la Virgen de la Teja en acción de gracias por tantos beneficios recibidos de Nuestra Señora desde que se digno visitar el barro de la Teja de sor Rosalía y por su presencia maternal en esta iglesia.

OFRECEMOS UNAS FLORES

Estas flores son el fruto de una semilla germinada en el silencio oscuro de la tierra.

Han sido cortadas de su raiz para presentarlas en tu Altar.

Así esta querida comunidad de Hermanas pobres de Sta. Clara, se  entregan en honor del Creador para sostener nuestras almas con la vida y la oración.

PAN Y VINO 

El pan y el vino se convertirán en el Cuerpo y la Sangre de Cristo entregado en sacrificio por nuestra salvación.

Infúndenos, Jesús Eucaristía, un vivo deseo de amarte y recibirte para que se acrecienta en nuestras almas la gracia de nuestro bautismo.

Después de la presentación de las ofrendas, continuó la Eucaristía con el prefacio, el canto del Sanctus y la plegaria eucarística.

Después de la oración postcomunión el sacerdote se acercó a la reja del coro bajo para bendecir las copias de la Virgen de la Teja que había en la clausura del monasterio para personas que las tenían encargadas de fuera y no habían podido venir a la celebración y también las de los fieles que había en la iglesia.

EL SACERDOTE, CON LAS MANOS EXTENDIDAS DICE LA SIGUIENTE BENDICIÓN:

Te alabamos, Señor Dios inefable, que antes de la creación del mundo constituiste a Cristo principio y fin de todas las cosas y, en tu admirable designio de bondad, uniste a Él a la santísima Virgen, para que fiera madre y cooperadora de tu Hijo, imagen y modelo de la Iglesia, madre y protectora de todos nosotros: Ella es, en efecto, la mujer nueva, que reparó los estragos de la antigua Eva; la excelsa Hija de Sión que, uniendo su voz suplicante a los gemidos de los patriarcas, asumió en su corazón las esperanzas del antiguo Israel; la servidora pobre y humilde, de quien salió el Sol de justicia, tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo.

Padre Santo, te pedimos que tus fieles, que han elaborado esta efigie de la santísima Virgen, gocen siempre de su protección y graven en su corazón la imagen que contemplan con sus ojos.

Que tengan una fe inquebrantable y una firme esperanza, así como una caridad diligente y una sincera humildad; que tengan fortaleza en el sufrimiento, dignidad en la pobreza, paciencia en la adversidad, donación en la prosperidad; que trabajen por la paz y luchen por la justicia, para que, después de recorrer los caminos de este mundo en el amor a ti y a los hermanos, lleguen a la Ciudad permanente, donde la santísima Virgen intercede como Madre y resplandece como Reina.

Por Jesucristo, nuestro Señor.

R/ AMÉN.



Mientras el sacerdote recorre por el centro la iglesia asperjando con agua bendita se canta a la Virgen.

Llegado a la sede dirige la oración:

CONCLUSIÓN DEL RITO

El sacerdote con las manos extendidas bendice al pueblo.

El Dios, que en su Providencia amorosa quiso salvar al género humano por el fruto bendito del seno de la Virgen María, os colme de bendiciones.

R/ Amén.

Que os acompañe siempre la protección de la Virgen, por quien habéis recibido al autor de la vida.

R/ Amén.

Y a todos vosotros reunidos hoy con devoción, el Señor os conceda la alegría del Espíritu y los bienes de su Reino.

R/ Amén.

Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo + y Espíritu Santo descienda sobre vosotros.

R/ Amén.

Canto final. Sobre la tierra, epifanía, luz de gracia es María.

Acabada la misa dio inicio la procesión con el estandarte de la Virgen de la Teja por la manaza del monasterio.

Un ambiente de gran fervor se ha respirado durante toda la novena y ayer en la misa votiva.

Ayer vinieron desde Albacete, Alcázar de San Juan y Socuéllamos para festejar a Nuestra Señora.

Gloria al Señor y a la Virgen María, en su advocación de la Teja, por estos días de gracia que hemos vivido en Villarrobledo.

La procesión por la Calle del Pedregal
Entrada en la iglesia

 Finalizada la procesión se expone el estandarte en el presbiterio y se canta el Himno de la Virgen de la Teja

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario