viernes, 4 de marzo de 2022

RETIRO DE CUARESMA

 NUESTRA FE EN DIOS

Hacemos este retiro con el padre Santiago Martín, Franciscano de María.

Una meditación tan interesante que compartimos por si alguien está interesado.


Primero un resumen de la misma y después la explicación.

RESUMEN

-Dios existe y Dios me ama, esto es maravilloso.


-Soy importante para alguien tan grande como Dios.


-Puedo relacionarme con Él, puedo llegar a Él, puedo saber de Él con mi razón y con la Revelación.


-Este Dios es más fuerte que las fuerzas del mal, que existen y que tengo que mantener lo más lejos posible de mí y de los míos.



-Este Dios es el purificador de mis egoísmos.


-Es el purificador de los intentos de otros de convertirse en Dios y pedirme que yo los adore. Solo ante Dios yo doblo mis rodillas.


ESQUEMA

1.  QUIEN ES DIOS PARA MÍ: existe, es amor, soy importante para él.

2.ESTE DIOS PODEMOS CONOCERLO Y RELACIONARNOS CON ÉL: Oración y mandamientos.

3.  SOLO DIOS ES DIOS. Es el único Todopoderoso, El Señor que está por encima de todos, por encima del demonio.

4.  YO NO SOY DIOS.

5.  EL OTRO NO ES DIOS. Ni la familia, ni la patria, ni la empresa,…

 

QUIÉN ES DIOS PARA MÍ

Dios existe y me ama, yo soy importante para él.

Soy criatura amada por Dios y esto llena de paz y esperanza. Aunque esté pasando momentos de oscuridad.

No soy indiferente para Dios.

La práctica de la virtud lo es más cuanto más difícil, más heroica y por tanto tiene más mérito.



La fe puesta a prueba, se ejercita como virtud en los momentos de oscuridad.

 

PUEDO CONOCER A DIOS

Por medio de la razón, completada con la Revelación, yo me acerco a Dios y le conozco. 

Esto es maravilloso.


Nuestro Dios no es un Dios desconocido, es el Dios que me ama, y al que yo puedo tratar como a Dios, también como a un padre y a un amigo, que es Dios Señor.

Dios es accesible al recto uso de la razón. 

Por medio de la ley natural, del recto uso de la razón y la moral natural, podemos conocer a Dios, podemos ser auténticos seres humanos y agradar a Dios.


La importancia que se da a la razón en la religión católica no se da en ninguna otra religión.

Fe y razón son vías para el conocimiento de Dios.

Si la razón no ocupa su lugar, la religión se convierte en superstición o en secta; en superchería, magia o fanatismo que despersonaliza.

La Iglesia siempre ha defendido el recto uso de la razón, tal como está recogido en la encíclica FIDES ET RATIO.

La razón nos introduce, la fe ilumina las oscuridades de la razón, que muchas veces está confusa debido a los intereses creados por confundirla.

La fe evita que la razón degenere y completa lo que la razón no puede dar.

La razón viene complementada con la Revelación, manifestada desde Abraham hasta la plenitud en Jesucristo.

 

¿CÓMO PUEDO RELACIONARME CON DIOS?

Por dos vías:

-        La Sagrada Liturgia


-        Las buenas obras (los mandamientos)


La Sagrada Liturgia, no es lo que el hombre decide hacer para relacionarse con Dios, sino lo que Dios le ha dicho al hombre que debe hacer para relacionarse con Él.

No es un invento humano, es revelación, es la forma que tenemos para relacionarnos con Dios tal como Él nos lo ha enseñado. No podemos modificarla a nuestro antojo. Es el modo como Dios quiere que nos relacionemos con Él. El sacerdote no puede cambiar ni suprimir nada que ya esté ordenado en la Sagrada Liturgia.

Por medio de la Liturgia me relaciono con el Dios en el que creo, que sé que me escucha y que está pendiente de mis necesidades.

Dentro de la liturgia hay una parte privada que es la oración personal. Para que la oración sea auténtica debe tener varios aspectos:


-        Adoración

-        Confianza

-        Súplica de perdón

-        Acción de gracias

-        Petición humilde

-        Ofrecimiento

 

Nuestra relación con Dios no es solo litúrgica, es respuesta amorosa al Dios que me ama y por amor a Él amor al prójimo, cumpliendo unos mandamientos que proceden de la Ley natural y fueron explicitados por Moisés en los diez mandamientos y el mandamiento nuevo de Jesús.

“Señor, yo creo en ti y te demuestro mi amor en la Eucaristía, en la oración y amando al prójimo”

 

SOLO DIOS ES DIOS



Es el único Todopoderoso. El Señor que está por encima de todo.

El diablo existe como ser personal. Puede ganar una batalla, pero no la guerra. El mal solo es vencido por el bien, Dios está por encima del demonio.

El hombre siempre añora el paraíso perdido. Hay quien vende su alma al diablo y causa mucha destrucción y daño, pero así no puede lograr la felicidad.

No se puede hablar de la fe católica sin hablar de demonio, pues existe y es terrible que en nuestra época se le ignore.

Es un ser personal, no conjunto de maldades, o ente negativo.

No es Dios.

Solo Dios es Todopoderoso.

Si no fuera así estaría el yin y el yan, pero eso no es de nuestra religión católica.

No se puede bromear ni jugar con el demonio. Por eso debemos rechazar toda forma que nos lleve a relacionarnos con espíritus que pueden ser un cauce para que el demonio entre en nuestra vida.

Tengamos una sana prudencia ante el demonio. Ante una necesidad, acudamos a Dios.

El amor es más fuerte que el odio, el bien es más fuerte que el mal.



Seguimos creyendo en medio de la oscuridad.

La misericordia tiene la capacidad de cambiar el mundo. Con el odio, la violencia, la injusticia no se puede construir nada.

Los que han vendido su alma al diablo pueden ganar muchas batallas, pero no ganan la guerra, pues con el odio y la venganza se puede destruir, se puede mentir, calumniar, se puede hacer mucho daño, pero no se puede construir. Y el hombre no puede vivir en medio de las ruinas.

Estando hecho a imagen de Dios, por muy herida que esté el alma del hombre por el pecado original y los pecados personales, el hombre añora el paraíso perdido, la vida en Dios que un día tuvo y perdió.

El hombre busca la felicidad y solo el amor puede darle la felicidad que busca. Todas las fuerzas del mal han sido derrotadas.

 

YO NO SOY DIOS

Porque el mundo nos dice todo lo contrario. Dedícate a cuidarte, a valorarte, no te dan lo que tienes derecho. Y esto nos genera malhumor y amarga nuestra vida.

Es más sano decirnos a nosotros mismos que somos criaturas de Dios, hijos de Dios, pero Yo NO SOY DIOS.


No debo intentar ser dios para nadie. Dios es el centro, yo no soy el centro.

No pretendas ser el centro de nada ni de nadie.

No pretendas que el mundo gire a tu alrededor. Bájate del pedestal.

 

EL OTRO NO ES DIOS

Hay nacionalismos exacerbados, los que hacen un dios de la patria, sea vasca, catalana, o castellana…

La patria y la familia son importantes, pero no puedo matar o mentir por ellas.

Dios está por encima de todo.

Tampoco puedo hacer un dios del partido político.

La Iglesia Católica solo mira hacia arriba: Dios

Y hacia abajo: los hombres, sobre todo los más débiles.

La Iglesia hace de puente entre Dios y los hombres.

Ha sido y será purificadora de las idolatrías.

La Iglesia es profética y crítica, no se vende ni se deja comprar, atemorizar, chantajear.

Es fiel a Cristo y su mandato.

Podemos hacer un ídolo de la empresa, dándole más de lo necesario, y no cuidando de la familia ni de la propia alma.


Ponte en tu sitio y no permitas que te divinicen.

No divinices a nada ni a nadie, ni a personas, pidiéndoles que te hagan felices, cosa que no podrán conseguir, ni a instituciones, ni a patrias, ni a trabajos ni a nadie.

 


Que Dios nos ayude a conseguirlo. 

AMÉN

1 comentario:

  1. Muy hermosa la reflexión sobre lo que debe ser nuestra relación don Dios y con los hermanos. Esta mañana he escuchado una charla al P. Santiago sobre el tema que me ha gustado mucho. Seguid comunicando todo lo que podáis estas buenas reflexionas








    a todo el mundo

    sobre lo mismo al P. Santiago Martín que me ha gustado mucho.

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