miércoles, 19 de junio de 2024

PRIMERA MISA DEL P. ERICK

 EN NUESTRA IGLESIA CONVENTUAL

El sábado 15 de junio, en la S. I. Catedral de Albacete, el obispo emérito D. Ángel Fernández Collado ordenó cuatro nuevos presbíteros para la diócesis, entre ellos D. Erick A. López Del Cid, sobrino de nuestra madre abadesa.

Su primera misa en Villarrobledo ha tenido lugar en nuestra iglesia. A ella han asistido familiares y amigos de Erick, que han venido desde Guatemala, y feligreses del pueblo que han querido felicitarle por su ordenación sacerdotal.

Para todas las personas que les hubiera gustado estar presentes y no han podido venir, hacemos esta reseña de nuestro blog.

A las 8:30 h. ha dado comienzo la Eucaristía, que ha sido votiva de la Santísima Virgen de la Teja, causa de nuestra alegría.

Desde el fondo de la iglesia ha salido la procesión de entrada con D. Erick y los sacerdotes concelebrantes: D. Daniel Galindo (párroco de San Blas), D. Pedro González (párroco de Santa María), D. Santiago Bermejo (párroco de San Sebastián), D. Gnahoua Fidele Goubo, D. Yury Vynnyk, P. Estuardo Cruz, un carmelita de Guatemala que fue padrino de D. Erick, acompañan la procesión algunos acólitos con la Cruz procesional y el incensario.

CANTO DE ENTRADA:

Aclamación a la Santísima Virgen de la Teja

MONICIÓN DE ENTRADA

Hoy nos hemos reunido en torno al altar para asistir a la primera misa en Villarrobledo del padre Erik.

Este monasterio es su casa en España y aquí está su tía sor Marta, por tanto es una gran fiesta para esta comunidad de hermanas clarisas.

En esta iglesia se custodia el prodigio de la Virgen de la Teja, por esta razón, la misa de hoy será votiva de la Virgen María, causa de nuestra alegría.

Encomendemos a Dios y a su Santísima Madre, al padre Erik para que sea un santo sacerdote y con su testimonio de vida atraiga a otros jóvenes que se sientan llamados al sacerdocio ministerial.

PRIMERA LECTURA: Isaías 61, 9-11

SALMO: Me alegro con mi Dios, Magnificat.

ALELUYA

EVANGELIO Lucas 1, 39-47

HOMILÍA

El padre Erick comenzó su homilía saludando a todos los asistentes, entre los que estábamos las monjas, pues esta fue su primera casa en España, cuando llegó desde Guatemala como seminarista, solo para terminar aquí los estudios de teología.

Estuvo alojado en la hospedería del convento.

He elegido la misa votiva de la Virgen, porque soy muy devoto de la Virgen de la Teja. Yo siempre pedía a las monjas que rezaran por mí a la Virgen de la Teja, para que me ayudara en mis estudios, por mi vocación cuando pasaba momentos de prueba o dificultades.

Mi vocación es fruto de vuestra oración porque vosotras habéis estado constantemente ante el sagrario rezando por mí y por muchos sacerdotes y laicos.

He querido escoger la misa de la Virgen María causa de nuestra alegría, porque María es alegría para nosotros, porque ha querido entregar su vida a Dios sin retrasos. Cuando el ángel le propuso ser Madre de Dios, respondió que sí. ¡¿Qué sería de nosotros si hubiera dicho que no?!

Ella dijo que sí al plan de Dios sobre ella, con prontitud, y por eso es causa de nuestra alegría.

Cuando el ángel le dijo que su prima Isabel estaba en cinta de seis meses, la Virgen corrió a toda prisa y subió a la montaña, para ponerse al servicio de su prima, que la necesitaba, con humildad. ¡Y era la madre de Dios!

El ministerio del sacerdote consiste en ponerse al servicio de los demás con prontitud y sin retrasos, como Cristo y su santísima Madre, nos han enseñado.

¡Cuánto podemos aprender de esta actitud de humilde servicio de la Virgen en nuestra vida cristiana de cada día!

Seamos sencillos como ella, y no pongamos en primer lugar el yo egoísta que nos aleja de Dios. Dejemos que Dios actúe en nuestras vidas, poniéndolo en primer lugar siempre a Él. Digámosle: “Aquí estoy, Señor, ¿qué quieres de mí?” No pongamos trabas a Dios en nuestra vida.

Que María sea causa de nuestra alegría en nuestra vida cristiana.

PRECES

1- Por la Santa Iglesia: para que acogiendo con humildad y fe el don de la salvación, sea cada vez más, canal de gracia y de perdón para la humanidad. Roguemos al Señor.  

 

2- Por la iglesia que peregrina en Albacete, para que Dios nos conceda pronto un obispo según el Corazón de Cristo.

3- Por todos los pueblos de la tierra: para que descubran que compartiendo los bienes materiales, culturales y espirituales, se asegura el camino para un futuro de progreso real en la serenidad y en la paz. Roguemos al Señor.

 

4- Por los sacerdotes, las almas consagradas y esta Comunidad de Hermanas Pobres de Santa Clara, bendecida por la presencia maternal de María, en su advocación de la Teja, para que crezcan en su fidelidad al Evangelio y cada vez haya más jóvenes respondan con generosidad a la llamada del Señor. Roguemos al Señor.  

5- Por el padre Erik, para que sea fiel a la vocación recibida, como ministro del Señor Jesús, y sea dócil a las inspiraciones del Espíritu Santo durante toda su vida.

 

6- Por los que hoy nos reunidos en esta celebración: para que aprendamos de María a fiarnos humildemente de la Palabra de Dios y experimentemos en nuestra vida la fuerza de su amor. Roguemos al Señor.

PROCESIÓN DE OFRENDAS

VELA y SAL

Esta luz, junto con la sal, simboliza lo que está llamado a ser Erick y también cada uno de nosotros. Así nos lo pidió nuestro Señor, que seamos luz del mundo y sal de la tierra.

CASULLA

Esta comunidad de hermanas clarisas presenta una casulla para el nuevo sacerdote. La casulla es la vestidura que caracteriza al que preside la Eucaristía.

La Casulla Simboliza la caridad, que cubre todos los pecados y por apoyarse sobre los hombros, el suave yugo del Señor. La belleza y expresividad de los símbolos litúrgicos nos ayudan a adentrarnos en el misterio de Dios.

JUEGO COMPLETO DE ALTAR Y PURIFICADORES

Esta comunidad presenta unos purificadores que ha bordado para el servicio del altar del nuevo sacerdote.

PAN Y VINO

Presentamos el pan y el vino, que se van a convertir en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. El Niño de la Virgen de la Teja porta en su mano izquierda las Sagradas especies del pan y del vino, signo de su presencia viva entre nosotros.

CANTO DE OFERTORIO Y SANCTUS

PLEGARIA EUCARÍSTICA




AGNUS DEI

COMUNIÓN

ACCIÓN DE GRACIAS, leída por la madre Marta

Señor Jesús, creemos en ti, en tu presencia real en el Santísimo Sacramento del altar. Ahora estás en nuestro corazón. GRACIAS POR ESTE INMENSO DON, el Pan de la Vida, que nos dejaste como alimento de nuestro cuerpo y de nuestra alma.

Gracias, Señor, por haber instituido en la Última Cena, el sacramento del Orden Sacerdotal, pues tus ministros ordenados pueden actualizar cada día el sacrificio del Calvario, consagrar y distribuir el Pan Vivo, bajado del cielo, que tomamos en comunión.

Todos te damos gracias por el regalo que has hecho a la Iglesia que peregrina en Albacete, por los cuatro nuevos presbíteros, que fueron ordenados el sábado por D. Ángel Collado, obispo emérito de nuestra diócesis.

Gracias por el padre Erik, mi sobrino, que ha conseguido el ideal de su vida: ser ordenado sacerdote.

Ya es una realidad. Él ha sido elegido para representarte a ti, señor Jesús, el Buen Pastor de las ovejas.

Y hoy, por primera vez, celebra la Eucaristía en nuestra iglesia.

Te pido que le ayudes cada día en su camino sacerdotal a superar todas las dificultades que pueda encontrar. Que persevere en fidelidad a la vocación recibida, sirviendo a la Iglesia hasta el final de sus días.

ORACIÓN POSCOMUNIÓN, BENDICIÓN Y BESAMANOS.

Finalizada la misa, los fieles han besado las manos ungidas del nuevo sacerdote y le han dado la enhorabuena.

Luego han pasado al locutorio para el desayuno y la felicitación de las monjas.

Se le ha hecho un cartel de recuerdo de este día tan bonito.


 La tarta, realizada en nuestro obrador, con la foto del P. Erick
Partiendo la tarta en el locutorio
Abriendo su regalo
Una casulla y un juego de altar

PIDAMOS TODOS POR LA FIDELIDAD Y PERSEVERANCIA DE ESTE NUEVO MINISTRO DEL SEÑOR.

¡TODO SEA PARA LA GLORIA DE DIOS!

viernes, 7 de junio de 2024

UNA COMUNIDAD ENAMORADA

DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Hay constancia de que en el año 1900 se sustituyó el cuadro de san Juan Bautista, en el altar mayor de nuestra iglesia, por una imagen del Sagrado Corazón de Jesús de tamaño natural. Fue la madre Julia de la Concepción la que hizo el encargo de esta escultura. 

Ello fue debido no solo a la gran devoción que tenía ella como abadesa, sino toda la comunidad. Además en 1899 el papa hizo la consagración del género humano al Sagrado Corazón de Jesús y la publicación de la encíclica Annum Sacrum escrita por el papa León XIII.

Posiblemente fue esa la fecha en que si hizo la fotografía del retablo mayor que se ha conservado hasta el día de hoy.

El retablo mayor de nuestra iglesia, quemado en 1936.

Esta devoción se ha transmitido a las nuevas generaciones. Además, las jóvenes que van ingresando en nuestro monasterio tienen una gran devoción al Sagrado Corazón de Jesús.

Es tanta la devoción que tenemos su imagen en casi todas las estancias del convento:

Imagen que hay en la entrada al noviciado.

Imagen del “coro chico” desde él se ve el altar mayor.

Imagen que hay en el “coro alto”.

Imagen que hay a la entrada del “coro bajo”.

Cuadro original del siglo XIX dedicado por detrás por la Guardia de Honor de Madrid.

Imagen que hay en el “coro bajo”.

Altar de la iglesia nuestra dedicado al Sagrado Corazón de Jesús.

Esta fue la primera imagen que se compró en la posguerra y estaba en el centro del retablo provisional que se hizo al restaurar la iglesia en 1940.

Imagen del oratorio

junto a la Virgen de la Teja y santa Clara.

Imagen que hay en la puerta de acceso al Obrador.

Cuadro del pasillo del fregador a la cocina.

En el refectorio, sobre un mueble esta capilla.

En el claustro.

En una celda reuniones de la comunidad

junto al cuadro del Inmaculado Corazón de María.

Santa Jacinta de Fátima dijo:

“El Señor quiere que junto a su Corazón esté siempre el Corazón Inmaculado de María y que las gracias se las pidamos a través de Ella”.

A la entrada del convento teníamos una imagen del Sagrado Corazón, que por una temporada, no está en el monasterio.

El mes de junio está dedicado al Sagrado Corazón de Jesús y este año, la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, coincide con el primer viernes de mes, dedicado también a desagraviar los ultrajes contra el Corazón Amante de Cristo Redentor.

En 1765, el papa Clemente XIII, instituyó la fiesta litúrgica del Sagrado Corazón de Jesús, aunque en un principio solo para Polonia.

Casi cien años después, en 1856, con el beato Pío IX como papa, fue cuando la fiesta del Sagrado Corazón alcanzó dimensión universal.

Desde ese entonces, se han escrito cuatro encíclicas para hablar sobre el Sagrado Corazón de Jesús.

Annum Sacrum. Esta encíclica fue escrita por el papa León XIII y publicada el 25 de mayo de 1899. Con ella, este papa consagró el género humano al Sagrado Corazón de Jesús: “Nos, decidimos en consecuencia, que el 9, el 10 y el 11 del mes de junio próximo, en la iglesia de cada localidad y en la iglesia principal de cada ciudad, sean recitadas unas oraciones determinadas. Cada uno de esos días, las Letanías del Sagrado Corazón, aprobadas por nuestra autoridad, serán añadidas a las otras invocaciones. El último día se recitará la fórmula de consagración que Nos os hemos enviado”.

El motivo que tuvo León XIII para llevar a cabo esta consagración fue su gratitud ante la curación de una enfermedad peligrosa.

Miserentissimus Redemptor. Escrita por el papa Pío XI, esta encíclica vio la luz el 8 de mayo de 1928. El tema en el que se centraba era la “expiación que todos deben al Sagrado Corazón de Jesús”. Con este motivo, viene acompañada con una oración expiatoria al Sagrado Corazón.

Summi Pontificatus. La primera encíclica de Pío XII, en el año que fue elegido papa (1939), festejó los cuarenta años de la encíclica de León XIII, Annum Sacrum. En este documento Pío XII escribía:

“No hay necesidad más urgente, venerables hermanos, que la de dar a conocer las inconmensurables riquezas de Cristo a los hombres de nuestra época“

1939 fue el año en que comenzó la primera Guerra Mundial.

Haurietis aquas. Un centenario después de que la devoción al Sagrado Corazón de Jesús se hiciera universal, en 1956, el papa Pío XII repitió tema de encíclica, al hablar de nuevo sobre el Sagrado Corazón, en concreto sobre su culto.

Así escribe san Juan Pablo II del corazón:

-         El corazón es un símbolo que habla de la interioridad del hombre. (20-06-1979)

-         Hay que medir al hombre con la medida del corazón. (03-06-1979)

-         Vosotros valéis lo que vale vuestro corazón. (03-06-1980)

EL CORAZÓN en el lenguaje bíblico

En la Sagrada Escritura, el término antropológico que más se usa es “CORAZÓN”

En la Biblia hebrea aparece 853 veces.

En el Antiguo Testamento se habla 26 veces del Corazón de Dios y en el Nuevo Testamento 159 veces.

En el lenguaje bíblico “Corazón” significa el centro de la existencia humana, la confluencia de razón, voluntad, temperamento y sensibilidad, en la cual la persona encuentra su unidad y orientación interior.

Es importante remarcar que el fundamento de la devoción al Corazón de Jesús es tan antiguo como el mismo cristianismo. (Benedicto XVI, 15-05-2016)

La Devoción al Sagrado Corazón de Jesús tiene sus raíces en la Sagrada Escritura, aunque a lo largo de los siglos, el Espíritu Santo la ha ido mostrando más claramente.

El discípulo amado, durante la última cena reclinó su cabeza sobre el Corazón de Cristo. (Juan 13, 22-26)

Me mirarán a mí, a quien traspasaron y harán llanto como llanto por el Hijo único (Zacarías 12, 10)

Estas palabras las recoge san Juan en su Evangelio cuando vio que del Corazón traspasado de Cristo en la Cruz brotaron el agua y la sangre.

La lanza atravesó el Corazón de Jesús de lado a lado. No existe una forma más elocuente de amor.

Dios nos ha amado tanto que se ha dejado romper el corazón para darnos su Espíritu Santo y los sacramentos de la Santa Madre Iglesia.

Decía Benedicto XVI que celebrar la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús es celebrar la esencia del cristianismo: Jesucristo verdadero Dios y verdadero hombre.

Desde la Cruz Jesús nos muestra sus manos, pies y costado atravesados, por nuestro amor, para nuestra salvación.

Sus heridas nos han curado. No dudemos nunca del amor que Dios nos tiene y devolvamos amor por amor.

Recordemos sus palabras: Venid a mí todos los que estáis cansado y agobiados y yo os aliviaré. Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. (Mateo 11, 28-30)

La Liturgia de hoy, en el Oficio de Lectura nos ofrece este precioso himno:

Por la lanza en su costado

Brotó el río de pureza,

Para lavar la bajeza

A que nos bajó el pecado.

 

Cristo, herida y manantial,

Tu muerte nos da la vida,

Gracia de sangre nacida

En tu fuente bautismal.

 

Y, mientras dura la Cruz,

Y, en ella el Crucificado,

Bajará de su costado

Un río de gracia y luz.

 

El Padre nos da la Vida

Y el Espíritu el amor,

Y Jesucristo, el Señor,

Nos da la gracia perdida. AMÉN.

Estas fotografías corresponden a la Vigilia que tuvimos en el coro bajo, como preparación a la solemnidad de hoy.